Después del intenso y apasionante verano llega el
Otoño.
El calor nos ha permitido disfrutar del agua, de los
espacios abiertos, de lucir nuestro cuerpo… y ha atraído a personas fantásticas
con las que hemos compartido muy bonitas experiencias. Pero mucho tiempo así
acabaría con nosotr@s –por lo menos
conmigo-, así que ahora toca volver a nuestra vida habitual (¡Qué bien y qué
descanso!).
Este es el mejor momento para analizar lo que hay que
mejorar, hacer planes y prepararlo todo para dar el salto en Octubre.
¿No estáis conociendo a personas que se plantean un punto de
inflexión en Octubre?
Yo misma también.
Pero vamos a lo que vamos, que es a ver cómo se puede disfrutar
de la Naturaleza ,
del intercambio con otras semejantes y al tiempo enriquecerte como persona en
este estupendo espacio que nos ofrece la Casa.
Cambian los colores, va apareciendo el verde de nuevo. El pueblo, refugiado entre montañas. |
La dehesa de Poveda y Villatoro, visto desde el Mirador den Valle y las Piedras de la Meditación. |