Hola,
qué tal.
De nuevo en contacto para enviarte aires de campo.
Un campo silente, dormido, que se arropa a veces con un manto
blanco y limpio.
Que descansa y prepara las semillas que germinarán más adelante.
Mis semillas son las nuevas ideas para la Casa.
Es mi intención y deseo el proporcionar bienestar y equilibrio a
cualquiera que se acerque por aquí. Eso lo intento conseguir con un espacio bello,
unas comidas sabrosas, unos talleres enriquecedores y mucho cariño (y algo de
guasa también).
Lo del Turismo Rural está muy bien, pero está mejor poner el punto de
mira en el poder sanador que tiene
este mágico lugar unido a los Maestros que por aquí pasan.
Por eso, quizás sea momento de dar más fuerza a esto y definir la Casa
como
“Un lugar para cuidar tu cuerpo, para enriquecer tu alma”,
y hablar de “Turismo para el enriquecimiento interior”.